Las heladas es uno de los factores más limitantes para el sector agrícola, en este caso para el cultivo de la vid, es importante saber las diferentes medidas para prevenir los daños. ¿Te interesa? ¡Quédate te las contamos!
Según la época del año, las heladas se pueden clasificar en tres tipos: Otoño, invierno y primavera. Tanto las heladas de otoño como de invierno, no ocasionan ningún tipo de daño en los viñedos, y es que el cultivo se encuentra en reposo. Sin embargo, las heladas de primavera son las que más inconvenientes producen a este tipo de cultivo, y es que los viñedos se encuentran en plena fase de floración.
Las heladas que más preocupan para los viticultores son las heladas de radiación y las heladas de advección. Estas heladas se producen cuando llegan corrientes de aire frío próximas al punto de congelación, en este momento no se produce inversión térmica.
Este tipo de heladas pueden producirse en cualquier momento, si que es verdad, que son episodios poco frecuentes y únicamente afectan a zonas muy localizadas.
En cambio, las heladas de radiación, son tanto recurrentes como preocupantes, siendo un factor limitante para el cultivo. Este tipo de heladas ocurren en ausencia de nubes que limiten la radiación hacia las capas altas, el calor escapa a niveles superiores, produciéndose un enfriamiento en las capas más próximas a la superficie. Generando así una estratificación de temperatura en distintas capas.
En resumidas cuentas… cuando mayor riesgo hay, son las noches despejadas y con escasa humedad en el ambiente.
Las heladas por radiación provocan daños en el cultivo visibles como la congelación de las partes hidratadas de los tejidos, produciendo un aumento de su volumen pudiendo llegar a romper la membrana de las células vegetales de los brotes. Si hubiera una descongelación rápida, podría producirse un desgarro de la membrana citoplasmática y celulósica.
Es importante cuidar el terreno el cual tenemos cultivados nuestros viñedos, sin tener ningún tipo de vegetación, pero sí que es verdad que es importante no labrar. Puntualizamos que la utilización de corteza, paja, hierba seca podría evitar la disipación del calor acumulado.
Orográficamente, las zonas cóncavas son las más proclives a la sedimentación de capas frías, en cambio las zonas convexas permiten la dispersión.
Antes de escoger el método de prevención,es importante tener presente que los viñedos son cultivos que ocupan grandes espacios y no todas las técnicas pueden ser las idóneas.
El Sistema Antihelada, es un propulsor que aspira el aire que se encuentra en el estrato superior más caliente y lo impulsa a la superficie, donde se encuentran sus cultivos, este tipo de Sistema tiene una capacidad de hasta 7,2 hectáreas, hasta -4 grados y hasta -6 grados con calefactor, donde este complemento aumentará las kilocalorías que hay en la zona de protección para que se produzca el intercambio de temperatura
2. Aislamiento térmico
Este tipo de método trata de evitar la radiación hacia el exterior utilizando materiales aislantes, este tipo de método es impensable para explotaciones vitícolas.
3.Estufas SPAG
Este tipo de método, consiste en aumentar la temperatura hasta superar el punto de congelación a través de la agregación de kilocalorías en el ambiente. Es importante una correcta ubicación de las diferentes estufas.
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